- ¿quién soy en realidad?, ¿qué soy yo exactamente?
Cuando me miro desde mi imagen laboral como profesora de baile y artista a pequeña escala quizás, me veo más en conexión con este yo mio que emerge con fuerza cada vez más. La verdad es que al bailar me siento sensual, libre, desinhibida y hasta seductora. Sin embargo, cuando me miro desde otras facetas como la familar o la social, no puedo evitar reflexionar sobre algunas cuestiones tales como
- Si supieran todo lo que yo maquino en mi cabeza y, peor aun, todo lo que yo hago sin que nadie practicamente se entere... ¿qué pensarían de mi?, si me conocieran de verdad, ¿me seguirían amando?, ¿me aceptarían?.
Mi lado oculto emerge
en mis relaciones clandestinas,
en los recodos de mi mente,
y en las entrañas de cuerpo,
pero, sobre todo,
en lo más hondo de mi Ser.
Durante un tiempo, traté y de hecho, fui fiel a mi pareja, hasta que un día tomé la decisión de ser fiel a mi misma. No fué tarea fácil y es más, la culpa a veces me persigue todavia hoy, no por remordimiento de lo que hago, si no por mentir en cierta forma, ocultar verdad...
El temor al rechazo por "ser como soy" me abruma... y ... ¿cómo soy? INFIEL esta palabra me ha atormentado mcho tiempo, me he machado mucho por ello hasta llegar al discurso de
- "lo siento, no soy fiel, te amo, te deseo, te hago feliz, pero me niego a estar con un sólo hombre toda mi vida. Deseo amar a otras personas, experimentar, decubrir, sentir en otros cuerpos, en otras almas ... y ver el reflejo de lo que soy en otros ojos".
Aun así, resulta complejo.
Con el tiempo he aprendido a crear departamentos estancos e interpretar el personaje que toca en cada momento del día y de mi vida.
Hace poco una de las seguidoras del blog comentó que yo era capaz de decir lo que mucha gente piensa y hace pero no dice. Bueno, en realidad, yo tampoco lo hago abiertamente, más bien utilizo el anonimato para expresarme, aunque sinceramente creo que soy bastante transparente.
Me encanta hablar de sexo, disfrutar del sexo y es mi tema favorito en cualquier reunión. La cara me cambia por completo, comienzo con una sonrisa pícara y los ojos me brillan ... Cualquier expresión o comentario yo lo relaciono con algo morboso, erótico o sexual.
Tengo fama de disfrutona, morbosa y ardiente. Asi que toda persona relativamente cercana a mi tiene una idea clara de como soy en la cama.
Pero ... ¿sólo con mi pareja?
Yo creo que en el fondo las personas más allegadas a mi saben cómo soy, se imaginan todo lo que puedo hacer y supongo que prefieren no saber, ven pero no quieren ver la realidad por lo que eso pueda implicar.
Creo que eso pondría en peligro el equilibrio familiar y hasta personal de cada uno.
- Igual a ti te pasa como a mi o algo similar.
¿Crees que las personas somos fieles o infieles? ¿Es algo natural la fidelidad o más bien cultura?
Yo creo que en nuestra sociedad ser infiel es de entrada un pecado y de seguida un problema, pareces imperfecto, defectuoso, hasta denigrante para algunos; sin embargo, si observamos otras culturas vemos que no son monógamas y que hay otras formas de relaciones en pareja y de organización de las familias.
- ¿Habré nacido yo en el país equivocado?
Para bien o para mal, creo que he nacido en el adecuado y también pienso que no estamos preparados, yo tampoco si cabe, para asunir explícitamente que tu pareja tiene relaciones íntimas con otras personas y no sólo en el plano sexual, si no también de amistad, complicidad, afecto, confianza ...
Eso es una bomba de relojería que en el día a día de una relación de pareja y en familia es muy dificil de llevar.
Creo que tus reflexiones son válidas y como casi todo en esta vida aplican sólo al que las siente. La sociedad obliga muchas veces a ser hipócrita y no decir todo lo que pensamos, y es precisamente en este rubro que la infidelidad surge, porque finalmente, si pudieras decir abiertamente, no me da la gana tener un solo amante, dejaría de llamarse infidelidad, creo que por desgracia, si haces el acuerdo de ser fiel, debes cumplirlo. Yo no sé si es fácil o difícl, nunca me ha resultado difícil ser fiel, pero creo que el problema radica en no poder decir que no quieres serlo, no sé si me explico. Y bueno, ni hablar del gusto por la sexualidad, hasta la fecha la sociedad sigue negándole de un modo u otro ese poder a las chicas, si bien ya se nos permite "gozar" de ella, nunca en exceso o serás tratada de puta, y desde mi punto de vista, eso es una estupidez. Un beso y por aca seguiré.
ResponderEliminarInteresante blog. Coincido con el comentario anterior, me parece un poco egoísta esa infidelidad, ya que no hablamos de normas sociales establecidas sino del pacto que hiciste con la otra persona.
ResponderEliminarUn saludo.
Gracias por leer mi blog y participar con vuestros comentarios.
ResponderEliminarPermitidme decir que la duda respecto a lo que vivo realmente y a lo que imagino y fantaseo siempre está ahí.
Aún así, creo que si uno se queda con el pacto que hizo hace X años eso no resuelve nada, pues la realidad es bien distinta.
Somos seres vivos en contínuo cambio, asumir las consecuencias de tus actos es una cosa pero resignarse o conformarse por algo que se hizo en un momento dado es otro cantar.
Pienso que cada día vamos cambiando, aprendiendo, conociéndonos y que las decisiones que tomamos siempre son las más adecuadas en ese momento con la informacion y el conocimiento que tienes, con lo que piensas y sientes... pero cuando pasa el tiempo y ya has visto y aprendido la perspectiva de las cosas cambian.
Un día estaba en el médico y habían dos ancianas muy graciosas, me miraron y me dijeron. "Ay niña, si nosotras tuviéramos tu edad y supiéramos todo lo que sabemos ahora, qué diferentes serían nuestras vidas".
Sigo diciendo lo mismo, asumir que hiciste un pacto de fidelidad en un momento dado cuando estabas locamente enamorada y con tu cuento de hadas en la cabeza y que por ello debes seguir cumpliendolo, no resuelve la situacion, puedes aguantarte y flagelarte por "mala", claro que también podría romperse ese pacto, no? pero no es tan facil, sobre todo, cuando las decisiones que tomas implican a otras personas y, más aún, cuando en realidad la pareja funciona y hay armonia en el hogar.
Creo que hay una cuestión más profunda y es que las personas nos hacemos hipócritas porque hemos creado un sistema de creencias, morales sobre todo, que dista mucho de aceptar al ser humano como es.
El pacto del matrimonio es una imposición de la iglesia que ha heredado la sociedad civil. Tal pacto va siguiendo los intereses de esa casta dominante como imposición para perpetuar sus privilegios, pues si dos personas se unen para formar una familia y si se tuviera en cuenta la naturaleza humana, el compromiso debería darse con el cuidado y sostén de esa familia, pero no encorcetar los instintos básicos que finalmente ejercen su imperio, al igual que ocurre con el resto de los primate. Eso por un lado. Por otro al igual que existen todo tipo de acuerdo en el mundo social, comercial, etc. debería de haberlo en los acuerdos matrimoniales, no uno y exclusivo, como si toda los seres humanos fueramos iguales. Finalmente y hablando en el terreno real, no existen acuerdos "de por vida". El ser humano no es algo fijo e inmutable. Está sujeto a cambios al igual que todo cuanto existe. Y su vida de pareja no es una excepción. Siempre, claro, que la libertad de acción de uno también lo pueda ser del otro.
ResponderEliminarEl compromiso del matrimonio no es más que un invento de la iglesia, que no quiere saber nada del sexo para la reproduccion y que por supuesto elimina el placer.
ResponderEliminarSi la gente follara más, no habrían guerras, ni iglesias, ni fronteras ... ni tantas barbaridades que inventa la mente humana que vive frustrada porque no sabe amarse a si mismo, ni amar a los demas libremente, ni desde luego, se conoce y se acepta como es con su naturaleza humana y espiritual.
ResponderEliminarSí, si todos estamos de acuerdo en que la monogamia es una consecuencia heredada de la iglesia. Pero estamos hablando de un pacto establecido entre dos personas. Yo no puedo ponerme excusas. Estamos hablando de sexo pero finalmente nos referimos a mentir y a engañar. Si se hace un pacto con otra persona pienso que hay que ser honesto y cumplirlo o romperlo. También está la opción del primer comentario Anónimo, que haya libertad sexual para ambos.
ResponderEliminarEstimado ProfondoPorpora, estoy de acuerdo contigo, y es más, ese pacto entre dos personas en cierta forma está implícito en mi relación desde hace tiempo, quizás no tan explícito y es verdad que engañas o mejor dicho, ocultas información, por qué? pues como he comentado antes, no es lo mimos intuir que saber a ciencia cierta y demasiada informacion genera conflicto, en muchas ocasiones innecesario. Sigo pensando que el ser humano por su naturaleza egóica no está preparado para asumir determinadas cuestiones como compartir a una persona que consideras "tuya".
ResponderEliminarPues yo estoy de acuerdo con Profondo Porpora, y tb con uno de los anónimos, los acuerdos cambian con el tiempo, y la maravilla del dialogo es que puedes no aceptarlos, una infidelidad es imponer un punto de vista, lo cual no se me hace justo, y decir que el pacto se hizo bajo otras circunstancias no cambia nada, cuando tenía 12 mi mamá no me dejaba tomar, ahora ya no puede impedírmelo, las cosas cambian, las personas también, y los acuerdos pueden ser renovados o desechados segun sea necesario, si mi pareja no soporta la infidelidad, creo que es su derecho hacerlo, hay miles de personas que son felices en relaciones polígamas, de la misma forma, si mi pareja quiere acostarse con quien quiera, está en su derecho, si yo lo acepto, tengo que respetarlo. Ya sé que no vivimos en un mundo ideal y quizá las cosas no funcionan así, pero justificarnos no es útil, el que fuma puede justificarse diciendo que es el estress, no por eso daña menos sus pulmones. La sociedad tendrá que aceptar que sus reglas ya no son validas, pero primero debemos aceptarlas nosotros mismos.
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